Compañías Motorizadas Saharianas

Las Compañías Motorizadas Saharianas fueron uno de los mayores ejemplos de la «Guerra Veloz» o «Guerre Celere» desarrollada por la Italia Fascista durante la primera mitad del siglo XX. Pensadas como una fuerza de vigilancia y movilidad rápida sobre el inhóspito Desierto del Sáhara, su existencia tuvo un papel esencial en la defensa fronteriza de Libia con Egipto, Sudán, Chad y Túnez durante la Segunda Guerra Mundial.

Originariamente las Compañías Motorizadas Saharianas (Compagnie Auto-Avioni Sahariane) fueron creadas en 1923 como fuerzas de seguridad compuestas por jinetes a bordo de dromedarios, cuya misión consistía en patrullar el Desierto del Sáhara en busca de posibles guerrilleros de la Tribu Sanussi que habían osado hacer frente a la colonización italiana de Libia. Así desempeñaron sus funciones hasta Julio de 1937, cuando a estas compañías se les suprimió la montura animal por un equipo motorizado que varió desde vehículos semiblindados Autoblinda AB-41, a camionetas Fiat AS-42, coches todoterreno Fiat AS-37 y camiones Lancia 3Ro y Fiat 634 capaces de sortear cualquier obstáculo del terreno arenoso y pedregoso característico de la zona, abarcando grandes distancias a reconocer en un clima tan hostil.

Coches todoterreno italianos Fiat AS-42 de las Compañías Motorizadas Saharianas en Libia.

Coches todoterreno italianos Fiat AS-42 de las Compañías Motorizadas Saharianas en Libia.

Fueron organizadas un total de siete agrupaciones de Compañías Motorizadas Saharianas bautizadas como «Kufra», «Gialo», «Hon», «Sebha», «Garian», «Gadames» y «Ghat» a lo largo de toda la presencia de Italia en el Norte de África. Cada una estas unidades contó con un personal de 4 oficiales, 7 suboficiales, 32 soldados italianos y 77 soldados libios repartidos en una sección de infantería, un pelotón de ametralladoras, un pelotón de cañones anticarro y un pelotón de piezas de artillería antiaérea; junto a un parque motorizado de 16 coches todoterreno y 3 camiones, además de 3 aviones de reconocimiento Caproni Ca.309 «Ghibli».

Compañías Motorizadas Saharianas:
Compañía Sahariana «Kufra»
Comapñía Sahariana «Gialo»
Compañía Sahariana «Hon»
Compañía Sahariana «Sebha»
Compañía Sahariana «Garian»
Compañía Sahariana «Gadames»
Compañía Sahariana «Ghat»

Cuando Italia entró en la Segunda Guerra Mundial, el primer bautismo de fuego de las Compañías Motorizadas Saharianas tuvo lugar el 13 de Septiembre de 1940 durante la ofensiva contra Egipto desencadenada por el Grupo «Maletti» al mando del general Pietro Maletti, cuando cuatro de estas compañías saharianas participaron en la Batalla de Sidi Barrani conquistando 100 kilómetros de territorio británico y ocupando las Colinas de Niebeiwa. Precisamente estas mismas unidades serían las atacadas por el Ejército Británico del general Archibald Wavell en la «Operación Compass» a finales de 1941, siendo algunas de las compañías saharianas aniquiladas en Niebeiwa por una carga de 47 tanques Matilda y el resto entre Beda Fomm y el Oasis de Giarabub por tropas australianas y vehículos ligeros de los comandos conocidos como «Ratas del Desierto» o «Long Range Desert Group».

Tres soldados italianos de las Compañías Motorizadas Italianas juegan con dos perritos bajo la sombra de uno de sus aviones de reconocimiento Caproni Ca.309 "Ghibli".

Tres soldados italianos de las Compañías Motorizadas Italianas juegan con dos perritos bajo la sombra de uno de sus aviones de reconocimiento Caproni Ca.309 «Ghibli».

Mientras tanto aquel año 1941, las Compañías Motorizadas Saharianas desplegadas en el África Central también entraron en acción. Por ejemplo los soldados ítalo-libios de estas unidades combatieron intensamente contra las tropas de la Francia Libre en la Batalla del Oasis de Kufra sobre el África Ecuatorial y en la Batalla de Murzuk sobre el Chad. Sin embargo la mayor proeza la protagonizó la Compañía Sahariana «Kufra» en el Sudán tras aniquilar a una columna entera de vehículos británicos en los Montes de Uweinat, destruyendo cuatro camiones y capturando a todo su personal, incluyendo el comandante y los oficiales.

Durante el resto de la Segunda Guerra Mundial, las Compañías Motorizadas Saharianas destacaron en acciones como la Batalla de Mersa Matruh en Egipto o la defensa del Aeródromo de Barce, donde gracias a uno de los aviones Caproni Ca.309 «Ghibli» de reconocimiento que interceptó a la fuerza enemiga, los ítalo-libios consiguieron rechazar el ataque británico causándoles numerosas bajas en hombres y material. No obstante la negativa marcha de la contienda obligó a las compañías saharianas a modificar sus cuadros con 5 oficiales, 3 suboficiales, 2 soldados italianos y 133 tropas coloniales libias, así como aumentar sus medios motorizados con siete camionetas Fiat AS-37, siete coches todoterreno Fiat AS-42 y diez camiones Lancia 3Ro. Con estos medios se enfrentarían a los Aliados en la campaña de Túnez de 1943, patrullando los 35 kilómetros de la «Línea Mareth» y manteniendo combates contra el Ejército Británico del mariscal Bernard Montgomery primero en el pueblo de Medenine y luego en la Batalla de Wadi Akarit los días 6 y 7 de Abril, antes de que finalmente las últimas Compañías Motorizadas Saharianas terminasen siendo aniquiladas o se rindiesen tras una hoja de servicio impecable dentro del Ejército Italiano.

 

Bibliografía:

-Redacción Serga, Compañías Saharianas. Unidades Especiales Italianas en el Frente Africano 1937-1943, Revista Serga Nº102 (2016), p.17-24
-https://it.wikipedia.org/wiki/Compagnie_auto-avio_sahariane