Invasión de Birmania

Birmania comprendía una de las regiones del Sudeste Asiático más hostiles por su naturaleza de selvas frondosas, abundante vegetación, enfermedades tropicales y lluvias en forma de monzones cuando Japón agredió esta colonia del Imperio Británico en 1942. Lo que ocurriría durante los meses próximos fue una invasión fugaz que a mediados de primavera concluiría con una catastrófica derrota para los Aliados Occidentales y con la conquista total del territorio que desde entonces pasó a estar sometido al Imperio Japonés.

Plan del Eje

Japón se interesó por Birmania por las implicaciones estratégicas que conllevaba su posesión como punto de unión en el Sudeste Asiático. En primer lugar se amenazaría directamente al Imperio Británico en su «Joya de la Corona» que representaba la India, en segundo lugar se cortaría la llamada «Carretera de Birmania» que dejaría completamente aislada a la China Nacionalista de los suministros enviados por los Aliados dentro del marco de la «Ley de Préstamos y Arriendos», en tercer lugar se podría aprovechar algunos de los recursos naturales del suelo birmano como la rica agricultura y sus pozos petrolíferos, y finalmente en el aspecto diplomático con total seguridad se atraería a la neutral Tailandia a las potencias del Eje.

El Imperio Japonés poseía sobre el Sudeste Asiático desde el año 1940 a la Fuerza Expedicionaria de Indochina que se acuartelaba en Vietnam tras haber firmado un pacto con la Francia de Vichy, por aquel entonces un «estado títere» de Alemania. Después del ataque a Pearl Harbor el 7 de Diciembre de 1941 que propició el inicio de la Guerra del Pacífico, el XV Ejército Japonés del general Shojiro Iida basado en las fronteras de Camboya, entró en Tailandia y Malasia reuniendo a cuatro divisiones con las que posteriormente se proyectó la invasión de Birmania. Básicamente se trató de la 56ª División de Infantería en el extremo más oriental con la misión de despejar las orillas del Río Salween, seguida por la 55ª División de Infantería que torcería hacia la capital de Rangún, la 18ª División de Infantería que seguiría la misma ruta por el Río Sittang y la 33ª División de Infantería que desembarcaría cerca del Río Irrawadi para ascender en dirección a la India, además de contar con el soporte de los 600 aviones de la 10ª Brigada Aérea con base en el Istmo de Khra.

Tailandia apenas tardó en sumarse a las potencias del Eje y convertirse en un socio de Japón gracias a la iniciativa del «Mariscal» Phibun Songkhram, quién tras haber impuesto un régimen filofascista en el Gobierno de Bangkok, se marcó como objetivo arrebatar al Imperio Británico los «territorios irredentos» en Birmania habitados por la etnia thai, en concreto la provincia nororiental de los Estados Shan. Así fue como el Ejército Real Tailandés reunió a una agrupación denominada Ejército «Phayap» que al mando del general Jarun Rattanuk Seriroengrit desplegó a las 3ª,4ª y 5ª Divisiones de Infantería, más la División de Caballería.

Mapa de la Campaña de Birmania.

Otras fuerzas con las que contó el Eje para la invasión de Birmania fueron los miles de guerrilleros nacionalistas del Ejército Independiente Birmano al mando del general Aung San, así como los 200 comandos independentistas de la Agencia Sur (Minami Kikan) del capitán Keiji Suzuki, a quienes se había prometido la independencia de su patria a cambio de colaborar con Japón y contribuir a la derrota del Reino Unido. De igual manera medio centenar de nacionalistas hindús adscritos al Ejército Nacional Indio del capitán Ram Swarup también pelearían del lado del Imperio Japonés bajo la promesa de reconocer a la India Libre (cuyo gobierno en el exilio se hallaba en Alemania liderado por el «Netaji» Chandra Bose).

Aproximadamente las fuerzas del Eje sumaron un total de 70.000 efectivos entre 35.000 soldados thailandeses, 30.000 japoneses, 12.200 birmanos y 55 indios libres; así como 705 aviones (600 japoneses y 105 tailandeses).

Fuerzas del Eje:
·XV Ejército Japonés
-18ª División de Infantería Japonesa
-33ª División de Infantería Japonesa
-55ª División de Infantería Japonesa
-56ª División de Infantería Japonesa
-10ª Brigada Aérea Japonesa
·Ejército Phayap Thailandés
-División de Caballería Tailandesa
-2ª División de Infantería Thailandesa
-3ª División de Infantería Thailandesa
-4ª División de Infantería Thailandesa
·Ejército Independiente Birmano
·Ejército Nacional Indio

Plan de los Aliados

Birmania era una colonia del Imperio Británico desde las Guerra Anglo-Birmanas del siglo XIX y su sumisión al Reino Unido en el año 1886 cuando fue incluida administrativamente como parte del Raj de la India. A pesar de que aquel dominio siempre había estado muy desatendido, sobretodo desde el estallido de la Segunda Guerra Mundial porque un gran cúmulo de unidades anglo-indias fueron desviadas a otros frentes como el Norte de África u Oriente Medio, en cuanto el general Archibald Wavell (héroe de la «Operación Compass» con la que derrotó al Ejército Italiano en 1940) tomó el mando de la Comandancia del Lejano Oriente, empezó a fortificar la región desplegando a las siguientes fuerzas: el Cuerpo Birmano (Bucorps) con tropas nativas que incluía a la 1ª División de Infantería y la 2ª Brigada de Infantería; a la 17ª División de Infantería India con la 7ª Brigada Blindada que incluía 100 tanques Stuart y las las 16ª, 46ª y 48ª Brigadas de Infantería; y a una serie de elementos británicos traídos de la metrópoli entre los que estaban el 1st Batallón de Infantería «Glocestershire» y el 2nd Batallón de Infantería «Yorkshire», así como los 16 aparatos Buffalo la 67ª Escuadrilla de Cazas de la Fuerza Aérea Real Británica (Royal Air Force o RAF). A este organigrana hubo que añadir voluntarios de naciones extranjeras como el Batallón de Infantería «Gurkha» prestado por Nepal y el Escuadrón de Cazas «Tigres Voladores» del coronel Claire Chennault que envió Estados Unidos con 100 aviones P-40 Warhawk (pero con las pinturas de la Fuerza Aérea China porque en un principio eran mercenarios contratados por el Kuomintang).

China y el Ejército Nacionalista adscrito al Kuomintang del Presidente Chiang Kai-Shek iba a sostener parte del peso de la campaña de Birmania interviniendo desde la frontera con la provincia de Yunnan para evitar que el Imperio Japonés se apoderase de la carretera con la que la recibían suministros de los Aliados Occidentales, vitales para sostener los frentes de la Segunda Guerra Sino-Japonesa. Así fue como se organizó a toda prisa la Fuerza Expedicionaria China en Birmania bajo el mando compartido del general Luo Zhuoying y del general estadounidense Joseph Stillwell con los V, VI y LXVI Ejércitos que incuían 103.000 soldados y 80 tanques de origen soviético T-26. Básicamente su organigrama fue el siguiente: el V Ejército del general Du Yuming con la 200ª División Motorizada, la 22ª División Nueva, la 96ª División de Infantería, el Regimiento Blindado, el Regimiento de Artillería, el Batallón de Infantería, el Batallón de Reconocimiento Motorizado, el Batallón de Ingenieros, el Batallón Antitanque, el Batallón Antiaéreo, los 10º y 18º Batallones de Artillería, el Batallón de Servicios Especiales y los Regimientos de Transporte de Tropas y Suministros; el VI Ejército del general Kan Lichu con la 55ª División Temporal, las 49ª y 93ª Divisiones de Infantería, el 227º Regimiento de Infantería, el 13º Regimiento de Artillería, el 52º Regimiento Antiaéreo y los Batallones de Zapadores, Transporte y Especialistas; y el LXVI Ejército del general Chan Cheng con las 28ª y 29ª Divisiones Nuevas, la 38ª División de Infantería y el 18º Regimiento de Artillería; además de actuar como unidad independiente la 36ª División de Infantería que estaba integrada por numerosos musulmanes uigures de la provincia noroccidental de Sinkiang y dotada de armamento del Ejército Alemán (Wehrmacht) adquirido antes de la Segunda Guerra Mundial.

Aproximadamente las fuerzas de los Aliados sumaron 150.000 efectivos entre 103.000 soldados chinos y 47.000 tropas de la Commonwealth incluyendo anglo-indios, birmanos o nepalís; así como 190 tanques (110 británicos y 80 chinos).

Ejército Aliado:
·Cuerpo Birmano «Bucorps»
-1ª División de Infantería
-2ª Brigada de Infantería
-1st Batallón de Infantería Británico «Glocestershire»
-2nd Batallón de Infantería Británico «Yorkshire»
-Batallón de Infantería Nepalí «Gurkha»
·17ª División de Infantería India
-7ª Brigada Blindada India
-16ª Brigada de Infantería India
-46ª Brigada de Infantería India
-48ª Brigada de Infantería India
-63ª Brigada de Infantería India
·V Ejército Chino
-200ª División Motorizada China
-22ª División Nueva China
-96ª División de Infantería China
-Regimiento Blindado Chino
-Regimiento de Artillería Chino
-Batallón de Infantería Chino
-Batallón de Reconocimiento Motorizado Chino
-Batallón de Ingenieros Chino
-Batallón Antitanque Chino
-Batallón Antiaéreo Chino
-10th Batallón de Artillería Chino
-18th Batallón de Artillería Chino
-Batallón de Servicios Especiales Chino
·VI Ejército Chino
-55ª División Temporal China
-49ª División de Infantería China
-93ª Divisiones de Infantería China
-227º Regimiento de Infantería Chino
-13º Regimiento de Artillería Chino
52º Regimiento Antiaéreo Chino
-Batallón de Zapadores Chino
·LXVI Ejército Chino
-28ª División Nueva China
-29ª División Nueva China
-38ª División de Infantería China
-18º Regimiento de Artillería Chino
·36ª División de Infantería Sino-Uigur
·Fuerza Aérea Aliada
-67ª Escuadrilla de Cazas Británica
-Escuadrón de Cazas Estadounidense «Tigres Voladores

Raids de Diciembre de 1941

Oficialmente las primeras acciones sobre Birmania tuvieron lugar el 8 de Diciembre de 1941 cuando tras el anuncio de adhesión de Tailandia a las potencias del Eje, ya se produjeron algunos enfrentamientos menores y tiroteos entre las guarniciones fronterizas del Ejército Real Tailandés y las tropas coloniales del Ejército Anglo-Indio. Al cabo de una semana, el 14 de Diciembre, elementos del XV Ejércitos Japonés cruzaron modestamente la frontera birmano-tailandesa en su extremo más meridional, cerrando a los soldados británicos el contacto con el norte de Malasia, aunque fueron rechazados por guardias birmanos en una Estación de Policía situada entre la ruta de Tavoy a Merguin. Transcurridos cuatro días, el 18, los invasores volvieron a lanzar un segundo asalto contra el mismo sector con el que solo consiguieron ocupar la ciudad de Merguin, pero fracasó contra Tavoy, lo que les obligó por el momento a suspender nuevas penetraciones en la provincia sur de Tenasserim, salvo por la rápida de toma de enclaves secundarios en las montañas como Ye y el Paso de las Tres Pagodas.

Bombarderos Martin B-10 de la Fuerza Aérea Real Tailandesa preparándose para bombardear Birmania.

El 23 de Diciembre de 1941 tuvo lugar el primer bombardeo sobre la capital de Rangún por oleadas de bimotores Mitsubishi Ki-21 de la Fuerza Aérea Imperial Japonesa que incendiaron el centro de la ciudad y mataron a 1.000 civiles birmanos, perdiéndose durante el ataque ocho de los bombarderos nipones y tres cazas norteamericanos P-40 «Warhawk», uno de estos destruidos por una bomba en el cercano Aeródromo de Mingaladon. Al día siguiente la incursión, el 24, se repitió un segundo raid con 73 aviones japoneses que dejó otros 1.000 ciudadanos fallecidos entre el fuego y los escombros de los edificios, aunque los nipones sufrieron bajas muy elevadas porque les fueron derribados 23 aparatos de distintos tipos a cambio de encajar los norteamericanos la pérdida de tan solo 5 interceptores P-40 Warhawk a manos de los poderosos cazas Zero. Bombardeos similares también se produjeron desde 900 metros de altitud las jornadas del 28, 29 y 31 con daños muy graves tanto en la capital como en el Aeródromo de Mingaladon.

Como venganza por lo ocurrido en Rangún, el 7 de Enero de 1942 un escuadrón de 10 bombarderos Blenheim de la Fuerza Aérea Real Británica sobrevolaron el cielo de Tailandia y bombardearon el puerto de la capital de Bangkok. Aunque los daños fueron leves y apenas se produjeron víctimas mortales o heridos, los días 11 y 12 de Enero un grupo de bombarderos en picado Corsair O2U de la Fuerza Aérea Real Tailandesa se vengaron de lo sucedido arrojando numerosas arrojaron bombas sobre la ciudad de Mae Hong Son al oeste de Birmania.

Ofensiva en Birmania

Al amanecer del 15 de Enero de 1942, miles de tropas de la 55ª División de Infantería Japonesa cruzaron la frontera del suroeste de Tailandia y el norte Malasia con Birmania, escalando los Montes Tenassarim y arrollando a los escasos defensores del Cuerpo Birmano. A las veinticuatro horas del ataque que contó con un importante cobertura por parte de la aviación, el 16 los soldados japoneses ocuparon Punta Victoria, enclave estratégico para fijar una base naval en el Océano Índico y amenazar el Golfo de Bengala.

Tropas del XV Ejército Japonés en la frontera con Birmania junto a los Montes Tenasserim.

Como los Aliados rápidamente entendieron que el objetivo inicial del XV Ejército Japonés iba a ser la provincia de Tenasserim, dispusieron a sus escasos efectivos compuestos por la 2ª Brigada de Infantería Birmana y las 16ª y 46ª Brigadas de Infantería Indias sobre una gigantesca área romboide de varios kilómetros entre Papun y Sittang que se extendía hasta Tak. Debido al espacio tan amplio a defender, los soldados de la 55ª División de Infantería simplemente atacaron los puntos más vulnerables como hicieron el 18 de Enero a la hora de pasar por encima de las tropas nepalís del Batallón de Infantería «Gurkha» que resultó aniquilado casi al completo y expulsar a las tropas coloniales birmanas de sus atrincheramientos, arrebatándolas la ciudad de Tavoy el 19, o poniendo en fuga a la 16ª Brigada de Infantería India conquistando la localidad de Martabán.

El 22 de Enero de 1942 las tropas japonesas de la 55ª División de Infantería atravesaron los Montes Tenasserim por el Paso de Kawkareik y ocuparon la población de Rahaeng. A pesar de que tanto la 2ª Brigada de Infantería Birmana como la 16ª Brigada de Infantería India se atrincheraron en la ciudad de Moulmein, un millar de soldados japoneses cargaron contra la urbe, ayudados por 227 voluntarios del Ejército Independiente Birmano que gracias a la propaganda anti-británica provocaron la deserción de infinidad de tropas coloniales birmanas al servicio del Reino Unido. Así fue como tras un par de horas de batalla sobre las calles de la metrópoli, las fuerzas niponas y colaboracionistas conquistaron Moulmein.

Con la caída de Moulmein las fuerzas del XV Ejército Japonés terminaron invadiendo el resto de la provincia de Tenasserim, logrando a finales de Enero de 1942 establecer una cabeza de puente de más de 2 kilómetros en la orilla opuesta del caudaloso Río Salween. Respecto a las aldeas y pueblos pequeños casi todos fueron liberados por los colaboracionistas del Ejército Independiente Birmano que atravesaban los tortuosos senderos por la selva a bordo de camiones, coches y hasta elefantes de carga, siendo recibidos como héroes por la población civil en cada localidad sobre la que alzaban la bandera independentista del pavo real y en especial por los jóvenes que se enrolaron a miles para luchar por la causa del Eje.

Pilotos corren a los cazas estadounidenses P-40 Warwahk del Escuadrón de Tigres Voladores en Birmania.

Después de haber dejado atrás el Río Salween, el XV Ejército Japonés torció hacia el oeste y el 14 de Febrero atacó al Cuerpo Birmano del general William Slim en el Río Bilin, donde las tropas coloniales resistieron durante cuatro días hasta retirarse la jornada del 18, justo después de haber sufrido un terrible castigo con 600 bajas entre muertos, heridos y deserciones. Superado el Río Bilin, las columnas japonesas persiguieron a sus oponentes unos 48 kilómetros hasta alcanzar el Río Sittang la jornada del 22 de Febrero y tomar las plantaciones de caucho de los alrededores de Bogyagi. Como los defensores de la 17ª División de Infantería India se vieron desbordados por el fuego de artillero de los nipones y los asaltos de sus vanguardias que les acosaban cruzando en balsas el Río Sittang hacia diversos puntos de la orilla contraria, el general John Smith que lideraba defensa fue víctima de los nervios por la situación y contra todo pronóstico ordenó a sus ingenieros volar único puente que se vino abajo por la dinamita sin tan siquiera dar tiempo a escapar a las dos brigadas anglo-indias que quedaron atrapadas al otro lado del curso fluvial. A raíz de este fatal error, varios miles de soldados británicos e indios fueron aniquilados por los japoneses, salvo unos pocos afortunados que consiguieron escapar internándose en la jungla o subiendo a bordo de embarcaciones por las que descendieron en dirección a Rangún.

Evacuación de Rangún

Ante las preocupantes noticias procedentes del Río Sittang, el 2 de Marzo de 1942 el general Thomas Hutton decretó la evacuación de la capital de Rangún, priorizándose en primer lugar a la población civil con las mujeres y los niños, los enfermos de hospitales, pacientes de manicomios y presos de las cárceles. Gracias a la movilización de decenas de cargueros en el puerto y a dos trenes que a diario salían de la ciudad con millares de civiles en sus vagones, en tiempo récord se pudo sacar a 64.000 personas, incluyendo a 10.000 menores de edad, así como posteriormente a los inmigrantes indios y mestizos, comerciantes, misiones religiosas, etcétera (solo se prohibió marchar a las esposas asiáticas de los militares debido a que las leyes raciales limitaban su prioridad, lo que provocó infinidad de problemas y un decaimiento de la moral). Sin embargo los que huyeron por vía ferroviaria o marítima fueron afortunados porque la inmensa mayoría de los ciudadanos emprendieron una marcha a pie sobre la selva en dirección a la India, pereciendo 5.000 refugiados a causa del cansancio y enfermedades como el cólera.

Tanqueta Bren-Carrier junto a tropas hindús cargando a la bayoneta durante los choques en el Valle del Sittang.

La 7ª Brigada Blindada India que recientemente se había desplazado al sur de Birmania para retrasar el avance del Eje sobre Rangún, libró un combate acorazado contra unidades mecanizadas del XV Ejército Japonés que se saldó en una nueva derrota de los Aliados, ya que 5 tanques anglo-indios Stuart fueron destruidos y 4 de sus cañones anticarro pulverizados, a costa de solamente perderse tres carros japoneses Ha-Go. Después de aquel encuentro que acabó con la conquista de Pegu, la 33ª División de Infantería intentó bloquear la Carretera de Taukkyan para impedir la evacuación de Rangún, aunque un contraataque de tanques Stuart y tropas nepalís cargando a la bayoneta mantuvo a los nipones a raya, manteniendo por el momento abierta la ruta hacia el corazón de Birmania.

El fracaso de la 33ª División de Infantería sobre la Carretera de Taukkyan permitió que la salida de barcos y trenes de Rangún prosiguiera sin pausa pese a los bombarderos de la aviación japonesa que provocaron numerosos incendios y dejaron ardiendo varios depósitos de combustible, aunque los propios británicos contribuyeron al caos destruyendo sus propias instalaciones militares con dinamita y un lote de material bélico de la Ley del Préstamos y Arriendos con 900 camiones, 1.000 ametralladoras y 5.000 cartuchos de munición (para evitar que cayeran en manos del enemigo). Curiosamente el último tren partió de la capital a las 7:30 horas del 7 de Marzo cuando más de 3.000 soldados ya estaban a salvo en la India; mientras que el último buque, en concreto el carguero danés SS Heinrich Jessen, zarpó junto a un par de lanchas motoras a las 8:00 horas del 8 de Marzo. Al cabo de dos horas de haber quedado vacía la ciudad, a las 10:00 horas, las tropas del XV Ejército Japonés, los combatientes del Ejército Independiente Birmano y medio centenar de hindús del Ejército Nacional Indio entraron triunfales en Rangún.

Soldados del Ejército Independiente Birmano leales al Eje entrando en la capital de Rangún.

Inmediatamente a la caída de Rangún, el pánico cundió en otras ciudades de Birmania como en Mandalay, de donde fueron evacuados a toda prisa 400 mujeres y niños a bordo de aviones de dos importantes aerolíneas civiles, la Compañía Aérea Nacional India (Indian National Airlines) y la Compañía Aérea Real Holandesa (KLM); exactamente igual que sucedió en Myitkyina con un buen puñado de personas sacadas a bordo de la Compañía Aérea China. Lamentablemente mucho peor peor lo pasaron las columnas de refugiados sobre la selva porque a lo largo de varios kilómetros los guerrilleros del Ejército Independiente Birmano liderado por el general Aung San acosaron a los militares y sus familias. Tampoco mejor lo pasaron los pilotos estadounidenses del Escuadrón de Cazas «Tigres Voladores» porque los japoneses les arrebataron primero el Aérodromo de Keydaw y luego el Aeródromo de Magwe, lo que implicó la pérdida de un buen puñado de cazas P-40 Warhawk con los que hasta entonces habían abatido decenas de aparatos enemigos, incluyendo los mortíferos cazas Zero.

Intervención de China

El 18 de Marzo de 1942 la Fuerza Expedicionaria China a Birmania entró en contacto por primera vez con el XV Ejército Japonés, haciéndolo la 200ª División Motorizada con la la 55ª División de Infantería Japonesa a la altura de Tachiao. Durante la escaramuza los soldados chinos se defendieron con éxito aprovechando la cobertura ofrecida por los palmerales, lo mismo que en los alrededores de la ciudad de Oktwin y Yedashe que aguantaron varias embestidas enemigas los días 10 y 23 de Marzo. La suerte solo perduró hasta el 25 de Marzo, pues después de numerosas cargas las tropas niponas rompieron las líneas del Kuomintang apoderándose en efecto dominó de Tachiao, Oktwin y Yedashe hasta alcanzar los arrabales de la estratégica ciudad de Toungoo.

La Batalla de Toungoo comenzó a las 8:30 horas del 25 de Marzo de 1945 con un envolvimiento de las 55ª y 56ª Divisiones de Infantería Japonesas que avanzaron sobre la urbe por el norte y el oeste, cuya caballería eliminó algunos tanques T-26 de origen soviético y tanquetas CV-35 de origen italiano, antes de dejar atrapada a la 200ª División Motorizada. A partir de entonces se inició el asedio a la ciudad con incontables ataques de los soldados nipones que fracasaron porque las tropas chinas se parapetaron entre las calles y las viviendas de piedra con tejados de paja, rechazando a los asaltantes en cuanto se aproximaban a una distancia de entre 40 y 50 metros de sus posiciones. Lógicamente y a medida que pasaban los días, los japoneses se desesperaron porque efectuaron intensos bombardeos de artillería, lanzaron devastadores raids con su aviación y hasta liberaron gases tóxicos ilegales más propios de la guerra química que prohibía la Convención de La Haya.

Soldados de la Fuerza Expedicionaria China excavando posiciones al norte de Birmania.

A sabiendas de las dificultades por las que estaba pasando la 200ª División Motorizada China en Toungoo, la 17ª División de Infantería India que subía hacia el norte de Birmania, optó por dirigirse al lugar del asedio e intentar socorrer a sus socios del Kuomintang. Sin embargo el progreso fue un infierno desde el principio porque a la altura del Okpo los anglo-indios fueron emboscados el día 27 por una unidad acorazada con tanques Ha-Go del XV Ejército Japonés. Fruto de este encuentro la 17ª División de Infantería India tuvo que suspender su operación de rescate y retirarse hacia la India después de sufrir sus hombres 311 muertos y perder 10 tanques Stuart con varios camiones y cañones de campaña.

Tampoco la 7ª Brigada Blindada India que se replegaba a no mucha distancia del grueso de la 17ª División de Infantería India fue afortunada porque el 29 de Marzo una batería de artillería del XV Ejército Japonés se adelantó a sus oponentes porque después de emplazar una pieza anticarro sobre el camino y disparar contra la columna enemiga destruyendo un tanque Stuart a la cabeza, una fuerza oculta de 400 milicianos del Ejército Independiente Birmano al mando del oficial Ba Yan Naing cayó a la carga desde los flancos sobre los inmovilizados anglo-indios, entablándose a continuación una cruenta batalla a tiros y en ocasiones al cuerpo a cuerpo. El choque que fue conocido como la Batalla de Shwedaung finalizó con la victoria de los nacionalistas, ya que la 7ª Brigada Blindada India se retiró con unas bajas enormes que incluyeron 350 muertos y heridos, 10 tanques Stuart destruidos y 2 cañones capturados; aunque los fascistas birmanos también encajaron 420 bajas entre 60 muertos, 300 heridos y 60 prisioneros.

Soldados japoneses abriéndose paso entre la vegetación de la selva de Birmania.

Mientras tanto en el asedio a Toungoo, las 55ª y 56ª Divisiones de Infantería fueron estrechando el cerco sobre la 200ª División Motorizada del Kuomintang. Sin embargo cuando toda ya parecía perdido para los nacionalistas chinos, apareció la 22ª División Nueva del V Ejército Chino que atacando desde el exterior del anillo, consiguió abrir un pasillo junto a la recientemente retomada Estación de Nangyun, donde los sitiados pudieron lanzarse al contraataque y emprender la huida pasando por encima de los escasos vigilantes japoneses que a causa del factor sorpresa no pudieron cerrar la brecha a tiempo. Así pues y después de haber dejado escapar intacta a la mayor parte de 200ª División Motorizada, los nipones tuvieron que conformarse simplemente con conquistar la ciudad de Toungoo.

Batallas de Prome y Yennangyaung

Prome fue el siguiente objetivo del V Ejército Imperial Japonés por situarse en un nudo de comunicaciones esencial dentro del centro mismo de Birmania después de que el general Archibald Wavell reorganizó a la 17ª División de Infantería India en un un cuadrilátero de la siguiente manera: la 63ª Brigada de Infantería en la propia ciudad de Prome, la 16ª Brigada de Infantería en unos atrincheramientos más al este de dicho enclave, la 48ª Brigada de Infantería en Hmawza y la 7ª Brigada Blindada en Tamagank. No obstante de nada sirvió la disposición porque la noche del 1 al 2 de Abril de 1942 un regimiento japonés atacó en la oscuridad para abrir brecha sobre el nexo de unión de las 48ª y 63ª Brigadas de Infantería, lo que propició la caída de todo el dispositivo de la 17ª División de Infantería y la entrada triunfal de las tropas niponas en la plaza de Prome. A no mucha distancia del lugar, justo en las posiciones del I Cuerpo Birmano, las fuerzas coloniales fueron también barridas por los soldados japoneses que el 3 de Abril ocuparon la ciudad de Taungdwingyi.

Simultáneamente sobre el área del V Ejército Chino, un grupo de 1.000 soldados nipones de la 18ª División de Infantería efectuaron un rodeo sobre la 200ª División Motorizada y la 22ª División Nueva que el 5 de Abril se habían fortificado entre la orilla septentrional del Río Sittang y los Montes Karen. A raíz de esta maniobra por la que se corrió el riesgo de un embolsamiento, las fuerzas del Kuomintang abandonaron el lugar la jornada del 8 para resistir un tiempo en el Río Szuwa, antes de replegarse una vez más a unas trincheras excavadas entre Pyinmana y Liehna. Milagrosamente en este lugar mantuvieron al enemigo unos días porque en el último instante recibieron refuerzos frescos de la 96ª División de Infantería. Lamentablemente en cuanto se produjo el derrumbe de todo el flanco derecho cubierto por la el Cuerpo Birmano entre la Alta Birmania y Yennangyaung los soldados chinos no tuvieron más remedio que huir hasta la seguridad que ofrecía el Río Meiyin, cayendo durante la retirada en manos de los japoneses las localidades de Pyinmana, Liehna, Kyidaunggan, Mawchi, Yato, Bawlake y Naba.

Restos ardiendo de la Refinería de Yenanguang..

El colapso del frente de los Aliados en la Alta Birmania tuvo unos efectos muy negativos porque los 7.000 soldados japoneses de la 33ª División de Infantería dejaron cercadas en la Refinería Petrolífera de Yennangyaung a la 1ª División de Infantería Birmana al mando del general James Bruce Scott y a la 7ª Brigada Blindada India del general John Anstice, ambas con 7.000 soldados birmanos y anglo-indios atrapados en su interior, así como 500 civiles, algunos misioneros occidentales y unos pocos periodistas estadounidenses. Curiosamente como la 38ª División de Infantería China del general Sun Lijen era la única fuerza más próxima, el Kuomintang tuvo que organizar una expedición de socorro compuesta por 1.121 soldados nacionalistas del 113º Regimiento liderado por el general Liu Fangwu, los cuales contra todo lo imaginado alcanzaron la bolsa y atacaron a los sitiadores por sorpresa, aprovechando del humo negro de los bidones de combustible ardiendo que ocultó su desplazamiento. Gracias a esta estratagema que los nipones jamás podían haber sospechado, las tropas chinas mataron a 700 soldados japoneses a costa de sufrir 542 bajas propias, contando chinos y fuerzas de la Commonwealth. Sin embargo y pese a que no se pudo evitar que los nipones terminaran ocupando la valiosa Refinería Petrolífera de Yennangyaung, los nacionalistas del Kuomintang abrieron un pasillo a la altura del Río Pin Chaung por el que escapó prácticamente toda la guarnición sitiada de 7.500 efectivos, además de 1.000 de sus caballos que rápidamente huyeron hacia el norte de Birmania.

Después del espectacular rescate del Cuerpo Birmano por parte de la 38ª División de Infantería China durante la Batalla de Yennangyaung, las tropas coloniales birmanas e indias, junto a las británicas y chinas, se atrincheraron en la orilla del Río Irrawadi para resistir durante todo el día 17 las embestidas de las vanguardias de la 33ª División de Infantería Japonesa. Gracias a que los soldados del Cuerpo Birmano y el V Ejército Chino mantuvieron la posición durante veinticuatro horas, el resto de fuerzas de la Commonwealth pudieron reabastecerse de gasolina, agua y víveres, para a continuación retirarse sobre el curso del Río Chindwin en dirección a Bangladesh, poco antes de que los japoneses finalmente colapsaran las líneas anglo-chinas cruzando el Río Irrawadi la jornada del 18 de Abril.

Corte de la «Carretera de Birmania-Yunnan»

Más hacia el este, en el sector de la 56ª División de Infantería del XV Ejército Japonés, los nipones lanzaron una nueva ofensiva con la pretensión de alcanzar la preciada «Carretera de Birmania». Los soldados que se infiltraron entre los palmerales con la bayoneta calada, pronto desbordaron las débiles líneas de la 200ª División Motorizada, la 55ª División Temporal y la 96ª División de Infantería, a las que arrebataron la localidad de Loikaw. Más complicado fue hacerse con la ciudad de Taunggyi, pues como los chinos contraatacaron con tanques T-26 y tanquetas CV-33, el enclave cambió varias veces de mano hasta que tras cinco días de sangrientos combates, los japoneses conquistaron la urbe el 25 de Abril y también la mayor parte de las aldeas rurales de los alrededores como Loilem, Mongnawng y Kongahiping, además de expulsar a las tropas del Kuomintang de sus atrincheramientos en Hsipao y Nanma la jornada del 27. Al día siguiente, el 28, cuando la mayor parte de las fuerzas chinas ya se encontraban en retirada, los soldados japoneses de la 56ª División de Infantería ocuparon la ciudad de Lashio, bloqueando de una vez por todas la «Carretera de Birmania».

Columna de tanques japoneses I-Go en Birmania.

Cortada la «Carretera de Birmania», la China Nacionalista quedó completamente aislada del resto del mundo (las costas las controlaba Japón desde 1941 y la Unión Soviética tenía cerrada la frontera con Siberia tras el Pacto de Neutralidad Soviético-Japonés), por lo que desde entonces el Kuomintang se vería obligado a luchar en solitario dentro de su propia patria contra Japón. No obstante y pese a las dificultades, todavía la Fuerza Expedicionaria China en Birmania se encontraba desplegada en la colonia inglesa huyendo en dirección hacia el norte mientras las tropas del XV Ejército Japonés perseguían a los chinos sobre las regiones selváticas controladas por las Tribus Kachin y Shan. Durante esta retirada caótica las vanguardias niponas de la 56ª División de Infantería se adelantaron a sus rivales y el 1 de Mayo de 1942 cruzaron la frontera suroccidental con China por la provincia del Yunnan, abriendo un nuevo frente en este país porque durante las jornadas próximas invadirían amplios espacios conquistando las ciudades de Hsenwe, Wanting y Lungling.

La entrada del XV Ejército Japonés en el Yunnan, coincidió con nuevos avances en el corazón de Birmania porque la 17ª División de Infantería India fue puesta en fuga de las localidades de Lacio y Maonywa, antes de caer en manos niponas la ciudad de Pakkoku. Al poco tiempo, la noche del 1 al 2 de Mayo, las fuerzas del Eje expulsaron a la 1ª División de Infantería Birmana de la Terminal de Ferrys de Monywa y al cabo de veinticuatro horas, el 3 de Mayo, asediaron la estratégica ciudad de Mandalay que recibió un cruento bombardeo preliminar de la aviación con la consiguiente muerte de miles de ciudadanos, incluyendo mujeres y niños, más la destrucción de edificios emblemáticos como el Club Alta Birmania, la Estación de Maymyo o el Hospital Baptista Americano (que se quedó sin energía para atender a los pacientes). Al cabo de unos minutos de sufrir la plaza semejante castigo, las tropas japonesas de las 18ª y 55ª Divisiones de Infantería, junto a unidades colaboracionistas del Ejército Independiente Birmano, entraron en Mandalay y se apoderaron con relativa facilidad de la metrópoli que por aquel entonces constituía la principal arteria de Birmania. A partir de la conquista de este objetivo que propició la rápida ruptura del frente central con la toma de Kalewa y los Montes Shwegyin, el general Archibald Wavell, sabiendo que ya na podría impedir la pérdida de la colonia, ordenó a todas formaciones de la Commonwealth emprender la retirada total hacia las provincias indias de Assam y Bangladesh.

Nada más conocerse las órdenes del general Archibald Wavell acerca del repliegue hacia la India, el pánico fue incontrolable porque todos los miembros del personal occidental, los ciudadanos europeos y los refugiados birmanos que venían desde Rangún, se agolparon en los caminos y carreteras para escapar, o bien en las estaciones ferroviarias o aeropuertos que no dejaron de ser bombardeados por la Fuerza Aérea Imperial Japonesa. Por ejemplo el raid más devastador tuvo lugar en el Aeródromo de Myitkyina, cuando después de embarcar familias enteras de padres a todos sus hijos pequeños en dos aviones de transporte Dakota DC3, un grupo de cazas japoneses aparecieron de la nada y ametrallaron sobre la pista a la pareja de aparatos que explosionaron envueltos en llamas, muriendo abrasados todos los pequeños ante la atónita mirada de sus progenitores. Similar episodio se repitió en la Estación de Pyinmina tras ser los andenes de tren alcanzados por varias bombas que mataron a 70 niñas mestizas de origen euroasiático justo en el instantes en que se procedía a la evacuación de su orfanato.

Dotación de ametralladora de la Fuerza Expedicionaria China en Birmania.

El repliegue simultáneo del Cuerpo Birmano, la 17ª División de Infantería India y la Fuerza Expedicionaria China facilitó al XV Ejército Japonés avanzar de manera arrolladora hacia el norte de Birmania. Entre los éxitos anotados durante aquellas jornadas estuvo el progreso protagonizado por las 18ª y 55ª Divisiones de Infantería que el 8 de Mayo conquistaron la estratégica ciudad de Myitkyina, donde arreabataron a los Aliados el último aeródromo con el que abastecían a China; además de ocupar apenas sin contratiempos las ciudades de Bhamo y Katha el día 10. A raíz de la captura de estos tres enclaves, el XV Ejército Japonés comenzó su maniobra envolvente hacia el noreste, amenazando tanto a las fuerzas de la Commonwealth como del Kuomintang a quedar embolsadas entre el centro-norte de la colonia y el Mar de Bengala.

Ataque de Tailandia a los Estados Shan

La mañana del 10 de Mayo de 1942, Tailandia que hasta entonces había permanecido a la espera de acontecimientos en Birmania, por fin cruzó la frontera con la provincia nororiental de los Estados Shan mediante un ataque de más de 30.000 soldados del Ejército «Phayap». Desde los primeros instantes las escasas guarniciones anglo-indias fueron arrolladas por unidades de caballería que atravesaron la selva desde los flancos, al mismo tiempo en que el grueso de las tropas thailandesas ponían a retirada a los soldados del VI Ejército Chino sobre el curso del Río Salween. Lo rápido del avance del Ejército «Phayap» se explicó por un masivo apoyo desde el cielo de la Fuerza Aérea Real Tailandesa que equipada con modernos bombarderos Mitsubishi Ki-21 (vendidos por Japón) y otros aeroplanos comprados a las potencias occidentales antes del inicio de la Guerra del Pacífico, arrasaron con sus bombas las plazas fortificadas de Keng Lap, Mong Lin, Mong Hsat, Mong Ton, Loi Mwe, Mon Ywang, Mon Hsa-La, Mae Sai, Taiung, Gyi, Daluo y Mong Ma, además de arrasar los barracones del Kuomintang en la ciudad de Kentung.

A la ofensiva del Ejército «Phayap» pronto se unieron las vanguardias del XV Ejército Japonés en el borde de los Estados Shan, aunque por el momento los soldados chinos consiguieron frenar a los japoneses sobre el Río Salween, empleando sus puntos fuertes en el Puente Huitung y en el paso fluvial de Malipa. Sin embargo las tropas chinas fueron incapaces de frenar la acometida de los thailandeses porque la 2ª División de Infantería que progresaba por el oeste tomó las poblaciones de Mongmaeken y Monghang, la 3ª División de Infantería por el centro se apropió de Tachileik, la 4ª División de Infantería por el este ocupó la de Ban Ongulek, y la División de Caballería que bordeó la jungla cruzó el Paso de Monghang y aplastó a los chinos en la plaza de Ban Piengluang. Aquel avance solamente se vio frenado con un repentino brote de malaria entre las filas del Ejército «Phayap» que obligó a sus fuerzas a atrincherarse en la selva y a levantar hospitales de campaña, a la espera de que la aviación thailandesa les arrojara contenedores con medicamentos de quinina en paracaídas. Una vez la mayor parte de la tropa se recuperó de sus problemas de salud, pudo reanudarse la ofensiva el 23 de Mayo con la conquista de Mongphyak por parte de la 3ª División de Infantería y de Mongsart que cayó en manos de la 4ª División de Infantería.

Soldados del Ejército Tailandés en los Estados Shan.

La Batalla de Kengtung, capital de los Estados Shan, fue el episodio más sangriento al que tuvo que enfrentarse el Ejército Real Tailandés cuando en la mañana del 24 de Mayo, sus vanguardias alcanzaron la plaza exterior de Loi Mwe y tuvieron que abrirse paso a tiros hasta expulsar a los defensores de la 93ª División de Infantería China. Inmediatamente a la neutralización de esta posición, los soldados thailandeses cargaron contra Kengtung, entablándose entre las calles de la ciudad un cruento combate contra los chinos que después de varias horas acabó con la retirada de éstos hacia Yunnan, no sin antes ser capturados un centenar que se rindieron. Finalizado el enfrentamiento, el comandante thailandés Chatichai Choonhavan escaló por una montaña de escombros del casco urbano y a modo de gesto simbólico izó sobre la cima de las ruinas de Kengtung la bandera nacional de Thailandia.

El 30 de Mayo de 1942, las columnas de la 56ª División de Infantería Japonesa y las del Ejército Thailandés «Phayap» enlazaron sus vanguardias tras tomar mediante un ataque coordinado de soldados de ambas nacionalidades la localidad de Mong Ywang. A partir de este unión entre las dos principales potencias del Eje en el Sudeste Asiático, finalmente se consiguió hundir todo el dispositivo del VI Ejército Chino en el Río Salween porque en tiempo récord las tropas japoneses cruzaron el Río Huitung y se apoderaron tanto de su puente como del paso fluvial de Malipa, aunque por lo menos al día siguiente, el 31, los ingenieros pudieron sabotear con suficiente antelación las bases de Chenanchieh y Mengchangchieh que cayeron en manos del XV Ejército Japonés.

Al mismo tiempo en el norte de Birmania, las ofensivas simultáneas de las 18ª, 33ª y 55ª Divisiones de Infantería Japonesas desbarataron todo el frente sostenido por la Commonwealth y el V Ejército Chino en el Río Chindwin, siendo destruida durante la retirada una columna china de la 200ª División Motorizada que sufrió numerosos muertos, incluyéndose entre las víctimas mortales tres comandantes y el general Dai Anlan. Algo más al noreste, las tropas japonesas invadieron con relativa facilidad los Estados Naga y los Estados Kachin, en parte gracias al apoyo de las tribus locales, arrebatando a la 96ª División de Infantería China el Fuerte Hertz, la cual escapó hacia su frontera próxima al neutral Tíbet. Simultáneamente en el suroeste, la 33ª División de Infantería Japonesa coronó con éxito los Montes Chin mientras una unidad motorizada colaboracionista del Ejército Independiente Birmano se adelantó a sus socios nipones y alcanzó la frontera con la India, conquistando la ciudad costera de Akyab (como recompensa los nacionalistas birmanos se apoderaron de un botín valorado en 1 millón de rupías). Respecto a las fuerzas del XV Ejército Japonés presentes dentro de China en la provincia de Yunnan, ampliaron su base de conquista ocupando varias aldeas y la entera comarca de Tenchung.

Retirada a la India

A partir de Junio de 1942 la retirada hacia la India era total por parte de las tropas de la Commonwealth y el Kuomintang, acompañadas por más de 600.000 civiles birmanos, indios, chinos, pakistanís y británicos, además de 400 elefantes de carga. La marcha a través de la angosta jungla constituyó un auténtico infierno, no solo por los ataques de la aviación japonesa o las emboscadas de los nacionalistas birmanos, sino también por la exposición a las lluvias monzónicas que anegaron los caminos y convirtieron el suelo en impracticables barrizales, sin obviar la proliferación de enfermedades como el cólera, la malaria, disentería y diarreas tropicales (la mayoría provocadas por ingerir frutos venenosos de la selva). Los que no cayeron víctimas de las epidemias típicas del monzón, desfallecieron en los días soleados por el hambre o el calor, dejando los senderos adornados de cadáveres envueltos por mariposas de colores que acudían a comerse su carne putrefacta, algo que complicó más la situación porque decayó la moral, se produjeron más de 2.000 casos de robos con violencia para obtener alimentos y encima se propagaron falsos bulos como una supuesta invasión de Gibraltar por parte del Tercer Reich.

Tropas del Ejército Anglo-Indio replegándose sobre Birmania en dirección a la India.

Desde la India los aviones de la Fuerza Aérea Real Británica intentaron abastecer a los más de medio millón de refugiados que atravesaban el Valle del Chindwin, arrojando contenedores en paracaídas con paquetes de comida, municiones y medicamentos (aunque a veces se produjeron accidentes porque varios de estos artilugios aplastaron a un puñado de soldados). Sin embargo no todo fueron malas noticias para las fuerzas de los Aliados en retirada, pues simpatizantes indígenas de las Tribu Kachin y la Tribu Naga ofrecieron agua y comida a los militares y civiles cuando pasaban por sus aldeas, además de recibir los enfermos la asistencia médica de mujeres hindús adscritas al Servicio Voluntario Femenino de Assam (Assam Women’s Voluntary Service). También surgieron héroes en momentos puntuales, como por ejemplo un mestizo anglo-indio llamado Frank Sinclair Gomes que se lanzó hasta en tres ocasiones al Río Mogaung para salvar a un soldado nepalí, a una mujer y a su hijo pequeño (lamentablemente no tuvo tiempo de rescatar a otros dos nepalís que se ahogaron); o el combatiente chino Luo Go que mató a dos guardias japoneses y les arrebató un elefante con el que transportó a varios compañeros lesionados hacia el Yunnan.

Otra de las tragedias vividas durante la campaña de Birmania fue el caos que se generó a la retaguardia debido a las acciones descontroladas de los guerrilleros del Ejército Independiente Birmano del general Aung San cuando aprovechándose de la confusión en la lucha contra los Aliados, comenzaron a masacrar a la Tribu Karen de origen cristiano en un acontecimiento que sería conocido como el «Genocidio Karen». Durante esta limpieza étnica en la que se quemaron cientos de aldeas y se asesinaron en brutales pogromos unos 50.000 miembros de la minoría karen, así como también en una magnitud menor a musulmanes de la Tribu Rohinyá, los japoneses y birmanos mantuvieron ciertos roces hasta que finalmente los nipones disolvieron al gobierno provisional de Rangún para instaurar a un régimen títere más prágmático bajo la fugura del caudillo o «Adipadi» Ba Maw.

Al norte de los Estados Shan, la 3ª División de Infantería Thailandesa del Ejército «Phayap» atacó el enclave de Mong Ma defendido por el VI Ejército Chino la jornada del 19 de Junio. A diferencia de otras plazas, los defensores contaban con varios cinturones de trincheras y túneles interconectados bajo tierra, por lo que las tropas thailandesas se estrellaron sufriendo gran cantidad de bajas frente a las bien protegidas fuerzas del Kuomintang. Como tomar la ciudad al asalto era imposible, se recurrió a la Fuerza Aérea Real Thailandesa que lanzó una serie de mortíferos raids con bombarderos Martin B-10 (comprados a Estados Unidos antes de unirse Tailandia al Eje) y bombarderos en picado de origen nipón Mitsubishi Ki-30 que arrasaron las posiciones de los nacionalistas chinos tras sucesivos raids los días 22, 25, 26 y 27 de Junio. Una vez disueltas las defensas chinas, los soldados thailandeses abrieron brecha en las fortificaciones y conquistaron Mong Ma haciendo numerosos prisioneros, antes de continuar la ofensiva ocupando con rapidez la población vecina de Mong La y estableciendo una cabeza de puente en la orilla opuesta del Río Nam Loi dentro de la propia frontera con China en la provincia de Yunnan.

A principios de Julio de 1942 las fuerzas del Imperio Japonés ya eran dueñas de la práctica totalidad de Birmania después de que la 56ª División de Infantería hubiese expulsado a los últimos elementos del VI Ejército Chino al norte del Río Salween. De igual forma en la frontera con el Yunnan, el Ejército Real Thailandés también se apropió de los Estados Shan al completo, embolsado y destruyendo la jornada del 12 a la 55ª División Temporal del Kuomintang. Al cabo de un mes, a inicios de Agosto, las vanguardias del XV Ejército Japonés terminaron de cruzar el Río Chindwin apropiándose de Taro y Shingbwiyang, antes de forzar la retirada definitiva de las escasas unidades supervivientes del Cuerpo Birmano, la 17ª División de Infantería India y el V Ejército Chino, lo que permitió adentrarse a los japoneses algunos kilómetros dentro de la India por Assam y Bangladesh.

El general estadounidense Jospeh Stilwell retirándose junto a soldados británicos y chinos sobre el Valle del Chindwin en dirección hacia la India.

El 3 de Agosto de 1942, los últimos 80 soldados de los Aliados presentes en Birmania, todos al mando del general norteamericano Joseph Stilwell, entre los que había algunas tropas británicas, oficiales estadounidenses, zapadores indios, enfermeras birmanas y dieciocho guardias chinos, atravesaron el Río Chindwin en ferrys a través de los muelles de Homalin, para acto seguido entrar en la frontera con la India sobre la llamada «Carretera Ledo». Con este último acto, las fuerzas de la Commonwealth terminaron de abandonar Birmania que desde aquel instante quedó en su totalidad bajo la órbita de las potencias del Eje.

Conclusión

La invasión de Birmania concluyó en el verano de 1942 con la conquista total y absoluta de la colonia por parte de Japón que en cuestión de nueve meses había protagonizado un espectacular avance de 1.600 kilómetros. Hasta entonces, la derrota consumada por los Aliados había sido catastrófica por cuatro motivos: en primer lugar, las bajas tanto a nivel humano como material fueron enormes para la Commonwealth y el Kuomintang (a costa de unas bajas mínimas por parte del Eje); en segundo lugar, el Imperio Británico perdió una de sus colonias más valiosas en términos económicos por las reservas de petróleo, caucho y arroz que pasaron a manos del enemigo; en tercer lugar, el territorio birmano proporcionó una base estratégica al Imperio Japonés desde la que dar el salto sobre la India; y en último lugar, se cortó la llamada «Carretera de Birmania» con la provincia del Yunnan que dejaría completamente aislada a China del resto de sus socios durante el resto de la Segunda Guerra Mundial.

Los Aliados sufrieron 86.500 bajas contando 56.480 chinos, 30.000 anglo-indios o birmanos y 22 estadounidenses, etcétera, así como 100 tanques destruidos y 117 aviones derribados (entre estos 80 norteamericanos). A estas cifras hubo que añadir paralelamente la muerte de 140.000 civiles, entre estos 80.000 refugiados y 60.000 karen o rohinyá durante el genocidio, así como 600.000 refugiados.

El Eje sufrió 4.597 bajas entre 2.454 tailandeses y 2.143 japoneses, así como 100 tanques destruidos y 117 aviones derribados. A estas cifras hubo que añadir paralelamente 80.000 civiles muertos.

Ocupada Birmania a mediados de 1942, el Imperio Japonés estableció un «estado títere» bajo el nombre del Estado Birmano al frente del Presidente Ba Maw que estableció un régimen fascista socio del Gobierno de Tokyo, mientras que Tailandia por el contrario se anexionó el «territorio irredento» de los Estados Shan. A partir de entonces y sobretodo desde 1943, las selvas de Birmania y de la frontera con la India se convirtieron en un escenario de guerrilla y contraguerrilla tanto por parte de los Aliados como del Eje, configurando un infernal teatro de operaciones en la jungla tropical que se convertiría en uno de los lugares más hostiles de la Segunda Guerra Mundial hasta su reconquista por el Reino Unido en 1945 y su independencia definitiva en 1947.

 

Bibliografía:

-Leland Ness, Kangzhan, Guide to the Chinese Ground Forces 1937-45, «Coalition Warfare-Burma» Helion & Company (2016), p.62-63
–John Smyth, La Larga Retirada: La Primera Campaña de Birmania, Revista Así fue la Segunda Guerra Mundial Volumen 36, Noguer (1972), p.57-63
-Carlo Caranci, Holocausto Atómico, «La guerra en Birmania», Ediciones Iberoamericanas Quorum (1986), p.78-80
-Christopher Bayly y Tim Harper, Forgotten Armies, Britain’s Asian Empire & the War with Japan, «1942: Debacle in Burma», Penguin Books (2005), p.156-207
-Derrick Wright, Pacific Victory, «To road to Mandalay», Sutton (2005), p.14-15
-http://www.panzertruppen.org/ww2p/1942p/birmania.html
-http://en.wikipedia.org/wiki/Burma_Campaign