«Comandos Mina» en Dinamarca

Dinamarca apenas había tenido un gran papel en la Segunda Guerra Mundial salvo permanecer el país ocupado por el Tercer Reich. Una vez finalizó la contienda en Mayo de 1945, las minas que el Ejército Alemán había plantado en el litoral occidental como parte de la Muralla Atlántica «Atlantikwall» para repeler una eventual invasión de los Aliados, tuvieron que ser desactivadas utilizando a prisioneros alemanes forzosos que serían conocidos como los «Minenkommando Dänemark».

El 11 de Mayo de 1945, un total de 2.600 prisioneros de guerra del Ejército Alemán, la mayoría adscritos a cuerpos de ingenieros o zapadores, fueron elegidos por el Ejército Danés para suprimir los campos minados a lo largo de la costa de Dinamarca. Bautizados estos hombres como «Minenkommando Dänemark», eran identificados porque sobre el uniforme alemán llevaban un brazalete blanco con dicha inscripción; exactamente igual que sus 52 oficiales daneses que sobre el uniforme del Ejército Británico habían añadido un brazalete amarillo con las dos palabras «Dansk Minekontrol».

Inicialmente la tarea de los «Minenkommando Dänemark» pareció sencilla porque se les facilitó todo el material necesario como detectores anti-minas, camiones, vehículos semioruga y por supuesto los planos que indicaban la presencia de los artefactos. Lamentablemente decenas de miles de minas habían sido enterradas de forma aleatoria, mientras que otras habían sido desplazadas con la marea o por el mismo movimiento geológico de la arena, además de ser muchas indectables por los artilugios magnéticos debido a que estaban recubiertas de materiales aislantes como madera, plástico o cristal. Así pues, los «Minenkommando Dänemark» tuvieron que arrastrarse por las playas de rodillas o reptando, al mismo tiempo en que con el filo de una bayoneta o vara metálica, iban pinchando la tierra para encontrar los artefactos. Una vez una mina era localizada, se desenterraba y limpiaba la arena de alrededor, para acto seguido desactivarla manualmente o bien explosionarla desde la distancia.

Grupo de» Minenkommando Dänemark» desactivando minas en Dinamarca.

El trabajo de un «Minenkommando Dänemark» no estuvo exento de accidentes y fatalidades que costaron la vida a muchos prisioneros alemanes durante las tareas de detección de minas entre 1945 y 1947. No obstante, lo peor tenía lugar cuando un campo quedaba totalmente libre de artefactos porque entonces las tropas danesas obligaban a los reos a desfilar en fila sobre el terreno para comprobar que no se hubieran olvidado de ningún elemento explosivo. De hecho, en algunos sectores era tan difícil llevar a cabo el desminado que las labores hubieron de abandonarse colocando una valla y un cartel que rezaba «livsfare miner» o «peligro minas» en idioma danés, tal y como por ejemplo sucedió en un tramo de 1’86 kilómetros de la Península Skallingen (el cual no sería seguro hasta el año 2010). Otros sectores con menos suerte serían declarados «indesactivables» como un área de 310 metros de arena junto a la Bahía de Esperanza, la cual terminaría siendo convertida en un espacio ecológico para la naturaleza sin la presencia de humanos.

Los «Minenkommando Dänemark» desactivaron un total de 1.402.000 minas en el litoral occidental de Dinamarca. A consecuencia de este inhumano trabajo, perdieron la vida 149 prisioneros alemanes y 332 resultaron heridos (165 graves con amputaciones y 167 leves), además de sufrir heridas 3 oficiales daneses que les acompañaban.

Oficialmente en 1949, el Comité Internacional de la Cruz Roja declaró ilegal el uso de los «Minenkommando Dänemark» por parte del Gobierno de Dinamarca. Curiosamente en 2015 y a modo de homenaje a estos artificieros forzosos, se filmó una película danesa titulada Tierra de Minas.

 

Bibliografía:

-Jesús Hernández, Esto no estaba en mi libro de la Segunda Guerra Mundial, «Voluntarios para desactivar minas», Almuzara (2018), p.345-348