HMS Terror

Nombre: HMS Terror
Nacionalidad: Gran Bretaña
Constructora: Harland & Wolff
Tipo: Acorazado
Clase: Erebus
Eslora: 120 m
Manga: 27 m
Peso: 7.300 toneladas
Velocidad: 13 nudos
Blindaje: 100 mm el casco / 50-25 mm la cubierta / 350 mm torres
Planta motriz: Dos calderas Babcock & Wilcox de 6.000 CV
Tripulación: 223 hombres
Botadura: 18 de Mayo de 1916
Aviones: Ninguno
Armamento:
·2 cañones de 381 mm en torreta
·8 cañones de 100 mm
·6 cañones de 76 mm
·4 cañones AA de 40 mm
·8 ametralladoras 12’7 mm
Historia:

Los monitores fueron una tipología de buques que ya entraron anticuados en el siglo XX. Mucho más propios para las campañas coloniales del siglo XIX, el HMS Terror fue una excepción porque al servicio de Inglaterra se distinguió notablemente tanto en la Gran Guerra, como en la campaña del Mar Mediterráneo durante la Segunda Guerra Mundial.

Basándose en el acorazado USS Monitor que combatió como batería de artillería flotante de la Unión en la Guerra de Secesión de Estados Unidos de 1861 a 1865, la Marina Real Británica (Royal Navy), se interesó enormemente en que Gran Bretaña poseyera esta clase de buques denominados «monitores». Así fue como la Compañía Naval Harland & Wolff de Belfast ubicada en Irlanda del Norte, botó el 18 de Mayo de 1916 el acorazado monitor tipo «Erebus» HMS Terror, cuyo nombre hacía referencia al buque desaparecido en la expedición del Ártico en 1845.

Acorazado monitor británico HMS Terror.

El HMS Terror era un acorazado que se caracterizaba por tener únicamente una torreta dúplex a proa equipada con dos cañones de 381 milímetros y un arsenal secundario de ocho piezas de 100 milímetros, seis baterías de 76 milímetros, cuatro antiaéreos de 40 milímetros y ocho ametralladoras Vickers de 12’7 milímetros. Aquella reducida potencia ofensiva que fue adaptada al diseño del navío, obligó a situar el puente de mando bajo el mástil (por detrás de la torreta) y a la chimena al final de la estructura; siendo la planta motriz un conjunto de dos calderas Babcock & Wilcox de 6.000 caballos de vapor que permitían desplazar sus 7.300 toneladas de peso y su blindaje entre los 25 y 100 milímetros a tan sólo 13 nudos de velocidad.

Oficialmente en Agosto de 1916, el acorazado HMS Terror entró en servicio como parte del Escuadrón Monitor de Patrulla de Dover (Dover Patrol Monitor Squadron) durante la Primera Guerra Mundial al mando del capitán Ernest Ebohard Callwell. Su misión fue vigilar el Canal de la Mancha entre Dover y Bélgica hasta que la noche del viernes 19 de Octubre de 1917, unas lanchas alemanas dañaron al HMS Terror con torpedos cerca de Dunkerque. Después de haber sido sometido a varios meses de reparaciones, en Abril de 1918 volvió al Canal de la Mancha para bombardear con sus baterías de largo alcance el Frente Occidental durante la Batalla de Lys, consiguiendo provocar numerosas bajas a las tropas alemanas que se lanzaron en oleadas contra las trincheras del Ejército Británico.

Al estallar la Segunda Guerra Mundial en 1939, el HMS Terror que se hallaba anclado en Singapur al mando del capitán Henry John Haynes, fue trasladado en Enero de 1940 a Gran Bretaña y posteriormente a la Isla de Malta. Cuando Italia entró en la contienda en Junio de 1940, el acorazado se tuvo que refugiar de los ataques aéreos en Alejandría, para volver a La Valetta en Noviembre y una vez más a finales de año a Egipto con la función de bombardear las posiciones del Ejército Italiano en Sidi Barrani. Durante la «Operación Compass» lanzada por el Ejército Británico, el HMS Terror proporcionó fuego naval al Cuerpo Australiano-Neozelandés (ANZAC) disparando sus cañones contra las trincheras italianas, fortificaciones, cuarteles militares e incluso las instalaciones del puerto de Bardia donde arrojó 660 proyectiles. Gracias al apoyo de los obuses pesados del HMS Terror, los soldados australianos gozaron de una protección efectiva para conquistar Tobruk y Cirenaica, aunque durante la acción el acorazado sufrió daños leves al chocar con una mina submarina lanzada por un bombardero alemán Heinkel He 111 en el puerto de Bengasi.

Monitor HMS Terror saliendo del puerto de La Valetta en Malta.

En torno a las 18:30 horas del 23 de Febrero de 1941, tres aviones Junkers Ju 88 de la Fuerza Aérea Alemana (Luftwaffe) procedentes de Catania en Sicilia, localizaron al acorazado HMS Terror navegando sobre las aguas cercanas a la ciudad de Derna en Libia. Inmediatamente los tres aparatos se lanzaron hacia el buque, fallando dos de los bombarderos durante el descenso, aunque el último pilotado por el teniente Theodor Hagen, acertó a la nave con dos bombas sobre la cubierta. Aquellos inesperados impactos produjeron los primeros incendios y el agua comenzó a entrar por varias vías bajo la línea de flotación. Afortunadamente la mayor parte de la tripulación pudo ser evacuada a bordo de los destructores HMS Salvia y HMS Fareham; mientras el HMS Terror se hundía y se sumergía bajo las cálidas olas del Mar Mediterráneo.

Con el hundimiento del HMS Terror en plena Segunda Guerra Mundial, despareció una generación de navíos por los que mucho se había apostado desde del siglo XIX. Desde entonces, los monitores pasarían a la mentalidad colectiva como una idea romántica de los gloriosos tiempos coloniales del pasado.

 

Bibliografía:

-Alfonso Marina, HMS Terror. Plataforma para el bombardeo naval en las dos guerras mundiales, Revista Serga Nº90, (2014), p.20-24
-http://en.wikipedia.org/wiki/HMS_Terror_(I03)