Hideki Tojo

El general Hideki Tojo ostentó el liderazgo de Japón durante la Guerra del Pacífico. Al frente de la mayor potencia del Eje en Asia, llevó al Imperio Japonés a su máxima expansión territorial y al mismo tiempo propició su declive hasta su caída definitiva al término de la Segunda Guerra Mundial.

Hideki Tojo nació un 30 de Diciembre de 1884 en el distrito de Kôjimaki en Tokyo, por aquel entonces la capital de Japón en la Era Meiji. Tercer hijo de Hidenori Tojo (sus dos hermanos fallecieron antes de él), su padre fue un antiguo samurái del Shoguntato Tokugawa que durante la Revolución Meiji se convirtió en oficial del naciente Ejército Imperial Japonés.

General japonés Hideki Tojo.

Siempre el Ejército Imperial Japonés fue la vocación de Tojo porque desde ya muy joven fue admitido en la Escuela de Cadetes a la que accedió en 1899. Aprobados todos los cursos, en 1905 Tojo ingresó en la Academia Militar de Tokyo, de donde se graduó con el número 17 de su promoción y ascendió a segundo teniente, siendo desde entonces conocido por sus compañeros con el apodo de «navaja» debido a su ritmo frenético de trabajo y su dedicación al oficio de las armas.

A nivel familiar y fuera del ámbito militar, Tojo se casó en 1909 con una mujer llamada Katsuko Iko. Fruto de este matrimonio nacerían un total de siete hijos entre los que hubo los tres varones Hidetake, Teruo y Yoshio; y las cuatro chicas Mitsue, Makie, Sachie y Kimie.

Con el estallido de la Primera Guerra Mundial entre Alemania y Japón sobre el Lejano Oriente, Tojo fue nombrado profesor de la Universidad Militar para instruir a los nuevos reclutas entre 1914 y 1918. Al año siguiente, en 1919, Tojo vio acción por primera vez en su vida cuando fue enviado a Rusia como parte de la Expedición a Siberia y combatió contra el Ejército Rojo bajo unas duras condiciones de frío y nieve dentro del contexto de la Guerra Civil Rusa.

Influido por el fervor nacionalista de la «Era de Entreguerras» como consecuencia de la limitación del poder de Japón durante las Conferencias de Paz de París y los acuerdos fijados por la Sociedad de Naciones, Tojo ingresó en un movimiento patriota llamado Grupo de Control Imperial (Tôseiha), concretamente una rama opositora de otra facción mucho más radicalizada que era conocida como el Grupo Benévolo de Acción Imperial (Kodoha) dirigido por el secretario Sadao Araki. Durante su estancia en esta facción ultranacionalista, Tojo ascendió meteóricamente e incluso consiguió unir a miembros de las dos vertientes moderada y radical hasta formar la Sociedad de la Doble Hoja.

Como miembro del Tôseiha, Tojo fue subiendo en el escalafón gracias a que muy pronto el Ejército Imperial Japonés se fue llenando de oficiales afines a dicha organización. De hecho y con motivo de sus contactos, Tojo fue elegido agregado militar en Suiza y posteriormente en la Alemania de la República de Weimar, donde entre 1920 y 1922 aprendió observando a movimientos nacionalistas como los Freikorps y el Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes (NSDAP) liderado por Adolf Hitler.

Al producirse el Incidente de Mukden en 1931 que precipitó la invasión a Manchuria, el Ejército del Kwantung reclamaría los servicios de Tojo para combatir en China. Así fue como el ambicioso oficial se batió contra el Ejército Chino del Kuomintang hasta alcanzar el rango de comandante y obtener el mando de la 4ª Brigada de Infantería en 1934. Al año siguiente, en 1935, Tojo lideró a la Policía Militar de Kantogun; mientras que en 1936, justo después de declarar su lealtad al Emperador Hiro-Hito tras el fallido Golpe de Estado «Ni Niroku Jiken», el monarca le premió con el ascenso a teniente general.

Con el inicio de la Segunda Guerra Sino-Japonesa en 1937, la 4ª Brigada de Infantería de Hideki Tojo abandonó Manchuria y penetró en la Mongolia Interior sobre la provincia de Chahar, avanzando más de 700 kilómetros de distancia en territorio enemigo y conquistando las ciudades de Chengde, Dolonnor y Zhangbei. Tras esta maniobra que fue histórica para el Ejército Imperial Japonés, el general de tanques Sakai Kouji catapultó a Tojo a la fama y lo promovió al rango de general.

La guerrilla del Partido Comunista liderado por Mao Tse-Tung en el ámbito rural fue otro de los escenarios a los que hubo de enfrentarse Tojo porque a diferencia de los combates contra el Ejército Nacionalista del Kuomintang, los maoístas solían atacar a los japoneses por la espalda o realizando emboscadas en la retaguardia, justo antes de escapar al contar con la ayuda incondicional de los habitantes de las aldeas montañosas. A raíz de este apoyo por parte campesinado, Tojo fue el artífice de la polémica política de los «Tres Todos» consistente, según sus palabras, en «quemar todo, saquearlo todo y matarlos a todos», lo que implicó la destrucción de cientos de pueblos y el asesinato de todos sus ciudadanos sin importar que fueran hombres mujeres o niños.

Nuevamente en 1938, el general Hideki Tojo regresó con la 4ª Brigada de Infantería a Manchuria para pacificar la región de los ataques de los guerrilleros comunistas liderados por Mao Tse-Tung. Al poco tiempo, Tojo accedió al Estado Mayor y volvió a Japón para ostentar el cargo de Viceministro de Guerra. A partir de entonces su carrera política fue fulgurante porque fue elegido para liderar la Cartera de Aviación y al mismo tiempo fundó la Policía Secreta del Estado (Kempei-Tai) a imitación de la Gestapo en Alemania. De hecho en 1939, con el inicio de la Segunda Guerra Mundial en Europa, Tojo se hizo con el control de los movimientos paramilitares a los que agrupó en la Sociedad Negra del Dragón; y en 1940 impulsó al Tôseiha a entrar en el Gobierno.

El Primer Ministro Hideki Tojo brindado con oficiales alemanes durante la adhesión del Eje con el Tercer Reich.

El 22 de Julio de 1940 el general Hideki Tojo fue designado Ministro de la Guerra de Japón y por tanto responsable de todos los asuntos relacionados con el Ejército Imperial Japonés, entre los que estuvo la repentina ocupación de la Indochina Francesa pese a las protestas de la comunidad internacional. Formando parte del Gabinete del Primer Ministro Fumimaro Konoe, también Tojo fue uno de los artífices de la conformación del Eje y la firma del Pacto Tripartito el 27 de Septiembre de 1940 junto a la Alemania Nacionalsocialista de Adolf Hitler y la Italia Fascista de Benito Mussolini, a las que rápidamente se unieron Rumanía, Hungría, Bulgaria, Finlandia, Eslovaquia y Croacia. Sería precisamente esta coalición la que llevaría a la ruptura diplomática de las relaciones con Estados Unidos, algo que como hizo la guerra inevitable a corto-medio plazo, convirtió a Tojo en el hombre fuerte de la nación para afrontar el incierto destino que la aguardaba. Así fue como el 26 de Agosto de 1941, el Emperador Hiro-Hito llamó al Ministro de Guerra al Palacio Imperial para evaluar la situación y dejarse convencer de que la mejor solución era atacar a Estados Unidos antes de que Washington se adelantase. Sería como a partir de esta cruda decisión, Tojo finalmente fue nombrado Primer Ministro de Japón el 17 de Octubre de 1941, siendo el número 27 en ostentar dicho cargo desde la Revolución Meiji del siglo XIX.

La mañana del 7 de Diciembre de 1941, la aviación de la Marina Imperial Japonesa al frente del almirante Isoruko Yamamoto que seguía órdenes directas del Primer Ministro Hideki Tojo, atacó la base aeronaval de Estados Unidos en Pearl Harbor. A la jornada siguiente, el 8 de Diciembre de 1941, Japón entró en la Segunda Guerra Mundial con Estados Unidos, al mismo tiempo en que Tojo declaraba hostilidades a Gran Bretaña, Holanda y la Commonwealth. A partir de esa fecha, desde finales de 1941 a mediados de 1942, Tojo amplió al Imperio Japonés a una extensión jamás antes vista porque en un período récord de seis meses conquistó Filipinas, Malasia, Birmania, Singapur, Hong Kong, las Indias Orientales Holandesas (Indonesia), Nueva Guinea, Nueva Bretaña, las Islas Marianas, las Islas Gilbert, las Islas Salomón, la Isla de Wake, las Islas Andamán y Nicobar, e incluso las Islas Aleutianas en Alaska.

Inesperadamente, el revés en la Batalla de Midway los días 4 y 6 de Junio de 1942 durante la cual fueron hundidos cuatro portaaviones nipones por sólo uno norteamericano, llevó a Tojo a suspender las futuras campañas de invasión previstas sobre Australia y la India, además de pasar a la defensiva. De hecho su estrategia basada en aferrarse al territorio ganado también fracasó porque tras la derrota en la Batalla de Guadalcanal a inicios de 1943, el Imperio Japonés comenzó su retroceso. Precisamente sería en este período cuando el Tôseiha dirigido por Nakano Seiko intentó negociar una paz alternativa con los Aliados, una trama que fue destapada por Tojo y que zanjó forzando el suicidio de su compañero.

A mitad de 1943 el Primer Ministro Hideki Tojo se convirtió en el principal impulsor de la Esfera de Co-Prosperidad de la Gran Asia Oriental tras una reunión que mantuvo con el «Netaji» Chandra Bose, un líder nacionalista hindú de quién quedó maravillado tras haber levantado para colaborar con los japoneses una agrupación de 80.000 hombres bautizado como Ejército Nacional Indio. Desde entonces Tojo promovió la independencia de gran parte de los países ocupados a cambio de someterse a vasallaje y firmar una coalición militar como fue el caso de Manckukuo, la China Nacional Reorganizada, Mongolia Interior, Birmania, la II República Filipina y la India Libre, además de fomentar futuros proyectos como la soberanía de Indonesia, Vietnam, Laos, Camboya y la Rusia Blanca.

El año 1944 comprendió un período de reveses para Tojo porque la «Operación U-Go» para invadir la India resultó un desastre durante las Batallas de Imphal y Kohima; mientras que la pérdida de las Islas Marshall y posteriormente las Islas Marianas tras la Batalla del Mar de Filipinas en que fueron hundidos tres portaaviones nipones, hicieron al Primer Ministro caer en desgracia. Así fue como el 22 de Julio de 1944, Tojo fue cesado del cargo y sustituido por el nuevo Primer Ministro Kuniaki Koiso.

Durante el resto de la Segunda Guerra Mundial, Tojo se retiró de la vida política y militar, optando por vivir tranquilamente junto a su esposa Katsuko en su hogar de Tokyo. Sus papel a lo largo de este período fue casi nulo porque desde casa contempló la debacle del Ejército Imperial Japonés en todos los escenarios, las bombas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki, y la rendición de Japón el 2 de Septiembre de 1945.

Hideki Tojo en los Procesos de Tokyo.

Sin poder soportar el peso de la culpa por la derrota del Imperio Japonés, el 8 de Septiembre de 1945 Tojo se disparó en el pecho con su pistola, con tan mala suerte que en lugar de apuntar al corazón (previamente su médico personal le había dibujado una cruz en la piel para no fallar), la bala se le incrustó en el estómago. Tras agonizar unas horas sufriendo un dolor insoportable, los soldados norteamericanos que acudieron a detenerle tuvieron que avisar a un médico y hospitalizarle, hasta que una vez recuperada la salud, fue encerrado en la Prisión de Sugamo.

Los Procesos de Tokyo mediante los cuales se juzgaron a los criminales de guerra de Japón, tuvieron como «protagonista estrella» a Hideki Tojo, el único líder de las grandes potencias del Eje que había sobrevivido a la Segunda Guerra Mundial tras la muerte de Adolf Hitler y Benito Mussolini. Según los cargos presentados por un tribunal compuesto por jueces de Estados Unidos, China, Gran Bretaña, Unión Soviética, Francia, Holanda, Australia, Nueva Zelanda, Canadá, India y Filipinas, se imputó a Tojo de los siguientes cargos: 1) Crímenes contra la Paz; 2) Crímenes de Guerra; 3 Crímenes contra la Humanidad; y 4) Complot de los tres cargos anteriores. Según las pruebas, los testigos y los documentos presentados, el 12 de Noviembre de 1948 se dictaminó a Tojo la sentencia: culpable de los cuatro cargos y condena a muerte en la horca.

El 23 de Diciembre de 1948, Hideki Tojo fue sacado de su celda de la Prisión de Sugamo y conducido al patíbulo. Una vez sobre la plataforma de la soga y antes de procederse a la sentencia, las últimas palabras del general fueron las siguientes: «Creo haber cumplido con mi deber lo mejor que he sabido durante el curso de toda la guerra. Ahora, cuando estoy a punto de morir, afirmo que no he cometido ningún acto del que pueda avergonzarme ante los Dioses. Ruego a los oficiales americanos que me han defendido, que me recuerden». Acto seguido la trampilla se abrió y el antiguo Primer Ministro falleció ahorcado por fractura cervical.

Hideki Tojo fue uno de los personajes más controvertidos de la Segunda Guerra Mundial. A pesar de ser el responsable de millones de muertos en el Asia Oriental, en Japón se le recordó como a un militar más del conflicto porque se incluyó su nombre en el Santuario de Yasukuni y además se le rememoró como uno de los mayores expansionistas del Imperio Japonés.

 

Bibliografía:

-Abraham Alonso y Luis Otero, General Hideki Tojo, Muy Especial Nº68 (2005), p.32
-http://www.exordio.com/1939-1945/personajes/tojo.html
-http://en.wikipedia.org/wiki/Hideki_Tojo